BIENVENIDOS

Hola amigos del planeta, bienvenidos a este sitio, en el que encontrarán textos originales del autor, cuentos y poemas, algunos de los cuales están escritos en náhuatl debido a que en el municipio de Rafael Delgado, Veracruz, México, aún se conserva esta lengua nativa de estos lares.(Pedro Enríquez Hdez.)



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25 ene 2009

SUBIRÉ AL PICO DE ORIZABA


Subiré al Pico de Orizaba
sólo para decirte que te amo;
me sentaré temerario en el cráter del coloso
para mirarte a lo lejos en la ciudad;
me asomaré a la chimenea volcánica
si sigues tú en el silencio.

Me arriesgaré al gas y a las cenizas
si no escucho nada de tus labios,
bajaré sin miedo a la cámara del magma,
e iré más allá de las rocas sedimentarias,
aspirando llegar al candente manto.

Y si estando en ese punto
escucho tu voz para decirme que me amas,
saldré de nuevo de las entrañas del volcán,
con la misma fuerza de la lava,
para arrojarme sobre tus brazos
y decirte que te amo.

24 ene 2009

MIS PUPILAS

Siempre cuando me he hallado pensativo
en el bosque, en la escuela o en el sendero,
con la mirada suave de mis ojos
yo siempre he dicho que tu amor espero.

Cuando el viento murmura entre las ramas
de los frondosos árboles espesos
y miras que me ahondo en el silencio,
es cuando más te digo que te quiero.

Cuando me miras solo y silencioso
no pienses que mi amor está desecho,
porque mis ojos clávanse en los tuyos
y con eso te dicen que te quiero.

Cuando tu nombre brota entre mis labios
y en mis ojos encuentras más destellos,
es cuando mis pupilas gritan mucho
y te revelan ¡oh, cuánto te quiero!

No pienses que mi amor cayó en los dejos
si en mí expresión no hay. Mi amor es sincero;
si te miro callado desde lejos,
mis pupilas te dicen que te quiero.

Cuando con la mía rozas tu mirada
y sientes que mi amor no es verdadero,
es cuando más, con esa luz callada,
¡¡ mis pupilas te dicen que te quiero !!

LAS MARIPOSAS

Con las alas de colores
sobre el fulgor de las rosas,
volaban las mariposas
simbolizando el amor,
mientras yo así te decía:
Amor, yo siempre te espero,
te amo, te adoro y te quiero
y tuyo es mi corazón.

Las mariposas volaban
el amor simbolizando,
tú y yo estábamos mirando
bajo ese inmenso calor,
mientras suavemente a tu oído
yo te decía casi a lloro:
Te quiero, te amo y te adoro
y mío es tu corazón.

En derredor de nosotros
vibraban las mariposas,
y sobre todas las cosas,
lo primero es el amor;
mientras los dos sonreíamos
yo de palabras un ramo:
Te quiero, te amo y te adoro,
la dicha está entre los dos.

Lentas las horas pasaban
y, cual un leve sopor,
la ilusión y nuestro amor
nuestras voces acallaban.

Las mariposas volaban
en una sobre otra flor,
mientras, junto a aquel fulgor,
dos corazones se amaban.

23 ene 2009

P L A N T A




Esta planta que veo
entre dos piedras
sonríe al saludar
la trémula sombra de las ramas,
alegre de seguro por los rayos solares.

Sí, te escucho.
Veo también tus vecinas
que juntas crean una belleza
al compás del ligero viento
de la mañana invernal.

Cinco hojas representan tu vida:
dos de ellas sobre la piedra,
otra, dormida, descansa sobre una hoja seca
y dos vuelan sobre el aire invisible y matinal.

¿Qué haces tú aquí en la tierra?
Ah, eso es: estás evolucionando
en la partícula mágica de la creación.
Eres pequeña y eres grande,
apenas te veo sobresalir
sobre el abrupto suelo
del jardín silvestre.

Más abajo, sin embargo,
hay muchos seres más:
hojas, plantas, insectos… piedras.
Cerca de ti muchos
pasan sin mirarte:
unos pisan tu presencia
sin saber de tu existencia.

Muy de cerca yo me asomo
y plasmo huella en tu hogar;
eres magia de los vientos,
sabia natura te formó…
Aquí contigo, criatura hermosa:
Nos saluda el amanecer.




22 ene 2009

TETL XOTLATOK

Tetl Xotlatok
neh no tooka,
nik sewia in tlamokahtok
wan tlekoltía tlawuil tzilinilstli,
tlawilti kuikuiltike
ipan inin tlakuikalistli.

Xikmachili noknitzin
noyollo ipehpetlayo,
tlawilti, tlahtolti wan tlahsotlalistli
inawak in kuawitl wichontok,
inawak in atl petlantok wan motlalowa,
inawak in weyatl no altepetl,
inawak in sitlaltzitzimitl iailwikah,
inawak in tototl paktok akin neh tlakuikah,
inawak in itzkuintli akin kolinía kuitlapil,
inawak in miston chokatok
wan inawak inin kualtzin Semanawak.


PIEDRA BRILLANTE



Piedra Brillante
yo me llamo,
apago el silencio
y elevo el sonido de las luces,
luces de colores
al son de este canto.

Siente, hermano,
una caricia de mi alma,
luces, voces y amor
al árbol que se asoma,
al agua vívida y rauda,
al río sinuoso de mi pueblo,
al mar sagrado del planeta,
al pájaro alegre que allá canta,
al perro que mueve la cola,
al gato que maúlla
y al bello esplendor del Universo.

AÑORANZAS PARA SERVIR


Cuando yo tenía siete años una vez mi abuela me dijo que en mi camino encontraría aves de mal agüero.

“Graznarán con toda su fuerza para que la maldición caiga sobre ti --me advirtió--, pero tú nunca te detengas. En la vida los caminos siempre serán así”. 

Mi madre me explicó también que en un pueblo de indios de igual modo suele “cantar” el tecolote. 

“Y cuando el tecolote canta --me indicó-- el indio muere”.

Cuando ya tenía 12 años y apenas cursaba el primer año de Primaria, mi maestro me recomendó practicar la lectura leyendo poesías de Salvador Díaz Mirón.

De ellas me gustó una en particular: A Gloria. Aquí entendí que “hay plumajes que cruzan el pantano y no se manchan”. “Mis plumajes serán de esos”, pensé.

Una vez, preocupado de cómo cruzar el río cuando el puente se había desplomado por un temblor, un nativo de la sierra, vestido de manta, sombrero y huarache, me comentó en náhuatl que “mientras el problema sea mayor, mayor deberá ser la calma para poder analizar con inteligencia y encontrar la correcta solución”.

De grande, cuando era estudiante universitario, el periodista Manuel Mejido me dijo que “si vas a ser periodista tendrás que pensar bien a quién servir”

El reportero --me comentó-- podrá trabajar para Dios o para el diablo; para el bien o para el mal; para el día o para la noche. Desde entonces me puse a reflexionar profundamente. Cavilé durante varias noches.

Ahora que estoy al frente de mi pueblo, todas las mañanas, antes de iniciar el trabajo, recuerdo las palabras de mi abuela, de mi madre, de un indio, de un poeta ilustre y de un gran periodista.

Estoy aquí, señores, para servir a mi pueblo, para servirte a ti y a mi prójimo, que, en su conjunto, representan a Dios. 

¡Que sigan graznando el pájaro de mal agüero y el tecolote, que ya estamos grandes para hacerles frente!

RATAS Y RATONES

I
En un cercano pueblo, de cuyo nombre no me quiero acordar, ocurre un fenómeno muy curioso: en lugar de personas los que habitan la localidad son ratas y ratones, pero han pretendido vivir como el hombre: trabajar en forma organizada, construir casas (ratoneras), hacer política y elegir a sus gobernantes para que haya orden y desarrollo en su pueblo. Así, apegados a esta forma de pensar homínida, los ratones comenzaron a progresar, después de sacudirse de un grupo de roedores malintencionados que durante mucho tiempo impidieron el progreso con actos de corrupción (en ese pueblo a los ratones corruptos les dicen ratransas.

En menos de veinte años la nueva generación que llegó al poder popular logró demostrar que gobernar y administrar con honestidad y eficiencia redundaba en beneficio de todos. De esta forma, los nuevos gobernantes –quienes fallaban poco no por ratransas sino por errores involuntarios- lograron pavimentar muchos conductos de ratoneras, construir madrigueras, agua entubada, drenaje, electrificación, alumbrado y construir aulas escolares para que pudieran estudiar y prepararse los pequeños roedores.

Los ratones estaban felices cuando vieron que trabajar honestamente ayudaba a mejorar las condiciones sociales de su pueblo, pero más cuando elegían a honestos gobernantes, pues estos administraban bien los recursos que se recaudaban por concepto de impuestos que todos los gobernados aportaban a la administración de gobierno.

Pero muchas veces la ambición o la falta de principios morales hunden a los pueblos. Esto fue lo que ocurrió más tarde en el pueblo de ratas y ratones, pues, una vez más, las elecciones populares llegaron y esta vez gran parte de los ratones electores cayeron en las redes tramposas de un ratransa, que de mucho tiempo atrás venía analizando la actitud de todos los roedores del pueblo y buscó la parte débil de los electores. De esta manera, cuando llegaron las elecciones la mayoría roedora emitió su voto a favor del ratón mayor en materia de corrupción.

II

El ratón candidato se llamaba ROBEN. Primero, para lograr la candidatura, buscó al presidente estatal de su partido para ofrecerle mucho dinero que había juntado tiempo atrás cuando había tenido la oportunidad de colaborar en una administración popular; ahí, con sus mañas, manipuló al Jefe gobernante honesto, quien no sabía leer ni escribir. Con engaños le hizo firmar documentos falsos para dejarlo mal y para opacar la imagen del partido político al cual pertenecía el Jefe gobernante. Concluida la administración, éste último fue aprehendido hasta en las puertas de su ratonera por un grupo de roedores que fungían como agentes judiciales de la zona; lo trasladaron a otro sitio y lo encerraron en la cárcel. Los ratones reporteros pronto divulgaron que el ex gobernante había sido detenido por un peculado de muchos millones de pesos. Pero pocos sabían que al ex jefe gobernante lo habían entambado (metido al tambo) por culpa de ROBEN, quien, aprovechándose del analfabetismo del ex gobernante, le hacía firmar cheques en blanco, pero era ROBEN el que cobraba las grandes cantidades de dinero.

Con este primer paso, ROBEN encontró camino libre para continuar con la obtención de la candidatura. Inició una labor de convencimiento en el pueblo, solicitando una cooperación a todos los roedores; éstos, olvidando el pasado negro de los gobernantes corruptos, aportaron fuertes cantidades al precandidato para que lograra sus propósitos. El dinero recibido lo destinó para comprar las conciencias de los otros precandidatos de su mismo partido. Logrando esto, ROBEN inició su campaña política.

III

Comenzó a recorrer todas las ratoneras habidas y por haber de todo el pueblo roedor, prometiendo transformar por completo la fisonomía de la localidad; es más, les dijo que construiría grandes fábricas de quesos y que todos tendrían comida y empleo bien remunerado sin necesidad de salir de las madrigueras.

Prometió también trabajar mejor que los gobiernos honestos de los últimos años postulados por otros partidos políticos. Utilizando el dinero aportado por los mismos ratones, ROBEN adquirió muchos productos, como frijoles, harina, leche, quesos, maíz, galletas, azúcar y otros satisfactores, los cuales los embolsó y distribuyó entre toda la población. Aparte, regaló dinero en efectivo y repartió materiales para la construcción de ratoneras. El ratransa se jactaba de tener mucho dinero.

--Y si el dinero público no alcanza –decía ante ratas y ratones-, todas las obras y trabajos en mi administración los realizaré con el dinero de mi bolsa.

Los ratones, obnubilados por la emoción de las grandes promesas, aplaudían y gritaban porras al candidato ratransa: “¡ roben, roben, roben !” El aspirante sonreía y, alegre, se acariciaba su frente pelona a causa de la calvicie. Vestía chamarra negra de cuero y pantalón azul de mezclilla despintada y ¡ja¡ unas botas vaqueras.

Llegan las elecciones y la mayoría roedora vota a favor de ROBEN. La errónea decisión fue a causa del engaño, la corrupción y las trampas indeseables del ratransa, ya que éste previamente se preparó: sobornó a los encargados de organizar las elecciones populares y conseguir a tiempo credenciales de elector de ratones de otras localidades. A la hora de los sufragios, llegaron grupos de roedores provenientes de otras partes y votaron por ROBEN, estimulados por el pago previo hecho por el mismo ratransa. Un mes después, el Jefe gobernante electo tomó posesión.

IV

La gran desilusión de todos los ratones del pueblo vino al día siguiente. Fueron a buscar al nuevo gobernante para plantearle la enorme lista de necesidades que aún existía en toda la jurisdicción territorial. Y pácatelas: ROBEN no estaba en el lugar donde debería estar para recibir a sus gobernados. Pero los desilusionados respiraron hondo y comentaron que posiblemente era porque se trataba del primer día de gobierno, por lo que más tarde se retiraron a sus ratoneras para regresar al día siguiente. Amaneció y a las once de la mañana de nueva cuenta ya estaban ahí, esperando a ROBEN. Por ahí sale su representante y les dice: no, no está. Los molestos ratones se enfadan y reclaman por qué entonces ROBEN usa como lema de administración “Por un gobierno de puertas abiertas y respuesta inmediata”. El disfuncionario les dice que de ello no se trata de un fraude. El lema –dijo- sí se cumple: “vean ustedes: las puertas de la oficina están abiertas porque ROBEN no está, y la respuesta inmediata consiste en decirles que no podemos atender sus problemas en estos momentos”. “Lo que tienen que hacer” –agregó el ratón representante- “es seguir buscando al Jefe; ah, pero tendrán que madrugar porque ROBEN es muy trabajador y llega a veces aquí a las cuatro o cinco de la mañana”. Los ratones escucharon atentos. Lo siguieron buscando hasta que muchos días después lo encontraron. Le reclamaron su actitud, pero él, prepotente hasta la exageración, antes de sacarlos a patadas de su oficina, los reprendió diciéndoles que nada tenían que reclamar, pues los votos que emitieron a su favor fueron votos comprados. “Así que –les indicó-… ¡fuera de aquí ratas huarachudas, no ensucien mis alfombras !”.

ROBEN no sólo era prepotente y autoritario, sino además amagaba con matar a cualquier ratón que contradijera sus hechos y sus palabras, aunque éstas estuvieran fuera de la razón; además, era un mentiroso patológico que, incluso, muchos pensaron que estaba loco. Pero no era así, sino padecía síndrome de alteraciones nerviosas y complejo de "grandeza". Como resultado, el ratón funcionario todo el tiempo se la pasaba diciendo estupideces a los medios de comunicación, como: “conozco a los ratones más grandes del mundo”; “sin mí este pueblo no existiría”; “en tres años de mi gobierno este pueblo de ratones será un verdadero paraíso”; “aunque no lo crean, estoy trabajando con mi dinero para mejorar las condiciones del pueblo”; “construiré mil casas al año para los ratones más jodidos”, etc., aunque en los hechos realmente nada hacía.

Más tarde toda la población roedora se dio cuenta que ROBEN no realizaba ningún trabajo serio, sino sólo hacia la finta de trabajar. Para eso presionaba a todos los ratones para que hicieran faenas para rasgar por aquí y por allá. Pero el propósito verdadero del ratransa es desviar recursos y pretender justificar gastos ante sus gobernados, de ahí la necesidad de rasgar y escarbar como jabalí por distintos rumbos de la localidad.

Al pueblo le daba coraje la actitud tan corrupta y deprimente de ROBEN, pero nada le podía reclamar, ya que de algún modo todos estaban involucrados en la elección de un mal gobernante. Mientras que el Jefe no llegaba a su oficina, los demás ratones empleados se la pasaban enfiestados todo el tiempo. Nunca pudieron entender que llegar al lugar donde estaban no era para servirse sino para servir: atender y resolver problemas. Lejos de cumplir con estos objetivos, lo que hacían era enamorarse y formar parejas extramaritales, a tal grado que en poco tiempo de iniciar la administración la mayoría de las ratonas empezó a manifestar síntomas de embarazo. Los ratones allegados a ROBEN y al manejo de los fondos públicos en seguida iniciaron la construcción de casas para albergar ahí a la segunda o tercera rata en amasiato; el "representante", quien al principio pretendió suplir la ausencia de su jefe, se distrajo también en tórridos romances en uno de los barrios de la localidad. Todo el equipo administrativo tomó una tendencia con miras a beneficiarse y beneficiar a las ratas y ratones de su mismo partido. Ya nadie se acordaba de la mística del servicio, o, más bien, nadie entendía los propósitos de un gobierno popular, pues desde ROBEN hasta el intendente a penas sabían medio leer.

V

Transcurrieron los tres años de gobierno y en el pueblo no se vio ningún avance de progreso. Un grupo de ratones que no estaban de acuerdo con los hechos ocurridos le prendieron fuego a las instalaciones donde se alojaba ROBEN y su equipo, pero la capacidad intuitiva de sus colaboradores avisó a tiempo lo que ocurriría, por esta razón muchas ratas y ratones huyeron con anticipación.

ROBEN, que es el ratransa principal, como siempre, embebido en la ambición, quedó calcinado dentro de su oficina mientras que su secretario y su tesorero huyeron por distintos lugares, lejos de sus dominios. Todos perdieron todo: ROBEN perdió la vida; el tesorero y el secretario, perdieron los cargos que ostentaban, el dinero, sus familiares y su patrimonio. Los pocos que no votaron por ROBEN, ratas y ratones honestos, salieron dignamente de su pueblo en el transcurso del mal gobierno; la mayoría, que sí había votado por ROBEN, perdió la dignidad y apoyó a su gobernante corrupto a cambio de insignificantes obsequios, como despensas con productos ya caducos, colchonetas, cobijas, atados de cartón, etc.

Los habitantes del pueblo luchaban siempre por superar sus condiciones de ratas y ratones; luchaban por una evolución y por un progreso de su género, pero en el transcurso del gobierno de ROBEN la mayoría sufrió un retroceso, remarcando su condición de RATAS Y RATONES.

21 ene 2009

CHOHKILVA

CHOHKILVA

Es el Chohkilwa que me despierta alegre por las mañanas mientras que mi madre me dice:

 - Levántate chamaco, que ya es tarde. 

Se asoma por la ventana y agrega: 

- Mira, ya amaneció. Córrele, de seguro los pájaros ya habrán arrancado las milpas. 

Es el Chohkilva el que con otros estremecen los cafetales con su canto, mientras que las gallinas y totolas se trepan en la escalera para dormir. y yo apenas llego del campo de cuidar las milpas. 

Es el Chohkilwa el que por las tardes se escucha hacer SIONNNN, y el sol se oculta allá a lo lejos detrás de las montañas, mientras que mi madre apenas levanta su batea, la ropa y las bolsas de jabón en la orilla del río para regresar a casa después de lavar uno o dos bultos de ropa.

Es el Chohkilwa que va allá como disfrutando el atardecer primaveral el cual tiende su manto sobre las flores de los campos y sobre los enormes árboles de mi pueblo.

Chohkilwa, símbolo de la eterna primavera, cantor de la belleza y despertador de los milperos.

A MI MUNICIPIO

I

Cual dulces y blanquísimas champolas
lucen bellas tus cándidas neblinas;
tus invernales aguas cantarinas
ingenuas corren, libres y sin olas.

Eres cuna de múltiples corolas
y de un río con aguas cristalinas,
artífice de flores tan divinas
como nardos y espléndidas gladíolas.

Chiahualpa te llamaron al principio
igual Teposchicoya te llamaste
para ser más tarde San Juan del Río.

Entre lluvias, neblinas y rocío
de esos nombres por fin te alejaste
para ser un moderno municipio.

II

Tus montañas contemplan silenciosas
los jardines repletos de azucenas,
las aves embellecen las escenas
y se tornan tus flores más hermosas.

Se saludan las hierbas olorosas
con las blancas gladíolas tan amenas;
cuando el abril arriba a manos llenas
se transforman tus lindas mariposas.

Tras cada noche silenciosa y muda
el Pico de Orizaba te saluda
con sus enormes mantos de algodón.

También como parte de tus dotes
“Tepoztécatl” resalta los ocotes
cual un poema, canto o inspiración.

III

Yaces como el rincón de la comarca
con elegantes cerros de arboledas,
desde lejos se aprecian como cedas
que destellan verdor el cual te enmarca.

Atezcatitla está por el Oriente,
Tepoztécatl se impone por el Sur,
y a lo lejos, tornándose ya azul,
otra montaña está, por el Poniente.

Salen con alegría de sus hogares
los niños y rebasan los rediles
cuando observan que ya lo jinicuiles
maduraron y caen en los solares.

Chinenes, aguacates y chayotes
ofreces a tu gente sin esfuerzo;
naranjas y cuayabas como almuerzo
se las comen también los guajolotes.

Cuando el sol ilumina los caminos
tu gente va al trabajo muy feliz,
cultiva los frijoles y el maíz,
formándose excelentes campesinos.

Todo el mundo trabaja a todas horas
desde que envía la luz el Gran Divino,
primero todos corren al molino
y después al mercado, las señoras.

A veces hay temor por las heladas
que atacan o amenazan los cultivos,
en tu tierra no existen los altivos
pues respetan las lluvias y suradas.

Tu gente es muy jovial y muy sencilla
y se acalora más con el tequila,
le entran los de Tzoncolco y Omiquila
y no se queda atrás ni Jalapilla.

A veces yo recorro cual campeón
tus campos, El Potrero y Las Sirenas;
he visitado igual, sin grandes penas,
Huizachtla, San Isidro y Boquerón.

Yaces como el rincón de mil corolas
con hablantes del náhuatl y español,
hoy alegre grito frente al sol:
que seas siempre el edén de las gladíolas

GRACIAS

Hoy amanecí feliz
al ver que el mundo seguía de pie,
levanté la mirada

y le di gracias al Autor de lo Infinito,
di gracias al pájaro que cantaba

en las copas de los árboles,
di gracias al sol que se asomaba a lo lejos,

en el horizonte mágico de las montañas;
me toqué el corazón y dije:
“gloria eterna al ser divino que habita en mí”.



Hoy amanecí feliz al ver que yo estaba vivo,
y tenía salud;

sentí ganas de brincar y saltar de alegría.

Hoy amanecí feliz al ver
que ahí estaban, junto a mí,
mis seres queridos,
sonrientes y con deseos de vivir;
levanté la cara, me toqué el corazón y dije:
gracias, “gloria eterna

al ser divino que habita en ellos”.


Hoy me siento feliz;
al caminar por las calles reparto sonrisas,
veo caras alegres y caras tristes
¡¡gloria eterna al ser divino

que habita en su alma!!
Luz en su espíritu,

fuerza divina
y síntesis del universo

en su corazón.